Buscando su independencia económica, mujeres se capacitan en pollerería

 

El Alto, 19 Oct. — Un grupo de mujeres y madres, cursantes del programa de empoderamiento y apoyo al emprendedurismo que lleva adelante la Unidad de Igualdad de Oportunidades de la Mujer de la Alcaldía de El Alto, realizó una demostración de sus habilidades para la confección de polleras a través de una exposición realizada en la unidad educativa Primavera de la zona del mismo nombre del Distrito 3.

“Se debe valorar el esfuerzo, entusiasmo y dedicación puestos por estas mujeres para confeccionar estas obras en diferentes tamaños y colores; y también su álbum de macramé.

También se están exponiendo las mantitas que hicieron”, afirmó Janeth Sanjinés, jefa de la mencionada Unidad, dependiente de la Dirección de Género de la Alcaldía.

Estos cursos están orientados a las mujeres de bajo recursos económicos y que en algunos casos sufrieron violencia, con el propósito de coadyuvar no sólo a su autosuficiencia económica sino a restituirles la confianza, la autoestima y el conocimiento de sus derechos.

“Paralelamente a la capacitación para el emprendedurismo, con estas mujeres y madres se realiza un trabajo de empoderamiento a través de talleres en los que se les explica los alcances de la Ley (348) Integral para Garantizar a las Mujeres una vida Libre de Violencia y otras normas vigentes afines a ese objetivo”, informó Sanjinés.

Además de pollerería y macramé, se dictan también cursos de repostería y chocolatería. Luego de estas exposiciones, que suponen una evaluación de lo aprendido por las participantes, se tiene prevista para fines de noviembre su graduación en conjunto.

“Estamos muy agradecidas por la capacitación que hemos recibido. Sin embargo, no fue tan fácil como pensábamos. Nos costó al principio el de poder confeccionar; sin embargo, todo sacrificio tiene su recompensa. Ahora ehmos lograro realizar nuestra prendas de vestir”, dijo Elizabeth Quelca Alavi, una de las participantes.

Tras su capacitación, muchas de las participantes están más cerca de concretar sus sueños de emprender su propio negocio y aumentar sus ingresos, lo que mejorará su calidad de vida y la de sus familias, acotó Sanjinés.

Las participantes agradecieron también la paciencia de la instructora y a la unidad educativa por haberles destinado un aula para pasar clases.

GAMEA