Seúl, 9 Ago. — Corea del Norte dijo el miércoles que está considerando planes para atacar con misiles el territorio estadounidense de Guam, horas después de que el presidente Donald Trump advirtió a Pyongyang que si vuelve a amenazar a Washington «se encontrará con un fuego y una furia que el mundo jamás ha visto».
El agravamiento de la tensión sacudió a los mercados y generó advertencias de funcionarios y analistas estadounidenses de no participar en una disputa retórica con Corea del Norte, que a menudo amenaza con destruir a Estados Unidos.
Pyongyang dijo que está «examinando cuidadosamente» un plan para atacar a Guam, una isla del Pacifico que alberga a unas 163.000 personas y una base militar estadounidense que incluye un escuadrón submarino, una base aérea y un grupo de la Guardia Costera.
Un portavoz del Ejército norcoreano, en un comunicado difundido por la agencia estatal de noticias KCNA, dijo que el plan de ataque será «puesto en práctica (…) en cualquier momento» una vez que el líder Kim Jong Un tome una decisión.
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, dijo que Trump intentaba enviar un mensaje enérgico a Corea del Norte cuando dijo que se enfrentaría al «fuego y la furia» si amenazaba a Estados Unidos.
El gobernador de Guam, Eddie Calvo, desestimó la amenaza norcoreana y sostuvo que la isla está preparada para «cualquier eventualidad», con defensas estratégicamente instaladas. Calvo dijo que ha estado en contacto con la Casa Blanca y que no se han registrado cambios en el nivel de amenaza.
«Guam es suelo estadounidense (…) No somos sólo una instalación militar», dijo el gobernador en un mensaje de video difundido en Internet.
Corea del Norte también acusó a Estados Unidos de idear una «guerra preventiva» y dijo en otro comunicado que cualquier plan para ejecutar esto será enfrentado con una «guerra total que eliminará todos los bastiones de los enemigos, incluyendo el territorio continental de Estados Unidos».
En una pequeña muestra de buena voluntad, Pyongyang dijo que había puesto en libertad por razones humanitarias a un religioso canadiense que cumplía una pena de cadena perpetua en prisión.
Trump emitió el martes su advertencia más severa a la fecha contra Corea del Norte en comentarios a la prensa en Nueva Jersey. «Es mejor que Corea del Norte no vuelva a amenazar a Estados Unidos, si lo hace, se encontrará con un fuego y una furia que el mundo jamás ha visto», declaró el republicano.
China, el más estrecho aliado de Corea del Norte pese a la molestia de Pekín con los programas nuclear y de misiles de Pyongyang, describió la situación como «compleja y sensible» e instó a la calma y a un retorno a las negociaciones.
«China llama a todas las partes a mantener la principal dirección de una resolución política al tema nuclear en la península coreana y evitar cualquier palabra o acciones que pueda intensificar el problema y escalar la situación», afirmó en un comentario enviado a Reuters, reiterando su postura usual. / Reuters