Resultados del repoblamiento del carachi amarillo y negro se verán en primer semestre de 2023

 

La Paz, 2 ene — Los 1,2 millones de alevines que fueron liberados en el lago Titicaca la última semana de diciembre, el cuerpo de agua dulce más alto del mundo, estarán listos para su captura en el primer semestre de 2023.

El presidente Luis Arce aseguró en sus redes sociales que con ese repoblamiento “no se permitirá que desaparezcan nuestras especies ícticas nativas del Titicaca”.

Los alevines  —crías de peces—  de carachi amarillo y negro, especies nativas y en peligro de desaparecer, fueron liberados en el lacustre municipio de Chua Cocacni por el presidente Luis Arce el pasado martes y la Institución Pública Desconcentra de Pesca y Acuicultura (IPD-PACU) prevé que podrán ser capturados entre junio y julio del próximo año cuando alcancen madurez y capacidad de reproducción.

Las comunidades aimaras deberán cesar hasta entonces la actividad pesquera con sus gigantes redes para dejar reproducir a la especie, demandó el IPD-PACU.

Como parte del proyecto, el Gobierno planea la construcción de una planta industrializadora de pescado en el municipio de Tiquina.

Además, prevé la construcción de un mercado de pescado en la ciudad de El Alto, vecina del Titicaca, como la producción de alimento balanceado.

De acuerdo con un último informe de la Autoridad Binacional Autónoma del Lago Titicaca, que la dirigen autoridades de Bolivia y Perú, en los últimos 60 años habrían desaparecido al menos 20 especies de Orestias luteus, nombre científico del carachi.

El Titicaca, encerrado entre montañas y volcanes de la cordillera de Los Andes, con sus 3.800 metros sobre el nivel del mar es el lago navegable más alto del mundo y uno de los más golpeados por la sobrepesca, la contaminación en Bolivia y Perú y el cambio climático.

ABI