La Paz, 8 jun.- El Canciller Fernando Huanacuni y el Embajador de la República de Italia en Bolivia, Placido Vigo, firmaron este viernes un convenio de financiamiento adicional por 25 millones de Euros para la ejecución de la segunda fase del programa “Cosechando Agua – Sembrando Luz: Componente agua segura”, que beneficiará a más de 4.800 familias de 25 municipios, de los departamentos de Oruro y Potosí.
“Valoramos la constante colaboración del Gobierno italiano que nos permitió desarrollar importantes proyectos en beneficio de nuestra población, sobre todo en favor de los más necesitados y poder acercarnos al cumplimiento de nuestras metas encaminadas hacia el Vivir Bien, para lograr que el pueblo boliviano viva en equilibrio de manera natural y complementaria con la Madre Tierra”, expresó el Canciller durante el acto.
El Proyecto será ejecutado en 136 comunidades ubicadas en zonas de clima semiárido, específicamente, en la zona altiplánica de Challapata, Caracollo, El Choro, Eucaliptus, Huanuni, Soracachi, Pazña, Poopó, Santiago de Andamarca, Machacamarca y Poopó (Oruro), Atocha, Betanzos, Caiza «D», Chaquí, Ckochas, Cotagaita, Porco, Puna, Tomave, Tupiza, Uyuni, Villazón, Vitichi y Yocalla (Potosí).
Los municipios y las comunidades beneficiarias fueron seleccionados de acuerdo a criterios relacionados con las tasas de pobreza y la falta de acceso al agua, con especial atención a las comunidades rurales dispersas y vulnerables al cambio climático.
Con este financiamiento 4.865 familias campesinas, 136 centros de salud y 136 escuelas contarán con soluciones de cosecha de aguas (familiares y sociales), beneficiándose a más de 19 mil habitantes de ambos departamentos.
El proyecto incluye también el componente de fortalecimiento y desarrollo de capacidades a las familias rurales y a los gobiernos autónomos municipales, en el uso y mantenimiento de las infraestructuras de cosecha de agua y en temas de educación sanitaria, ambiental y gestión pública.
Se busca de esta manera hacer sostenibles la inversión en soluciones de cosecha de agua y que las familias, escuelas y postas sanitarias beneficiarias puedan contar con agua segura, principalmente en las estaciones de otoño e invierno (meses de abril a septiembre), sin tener que caminar varias horas en la búsqueda de agua que es esencial para la vida y un derecho universal./ (UC – MMAyA)