Desde la cárcel, Áñez responsabiliza por su salud al Gobierno y ratifica «no fue golpe, fue fraude»

 

La Paz, 23 mar — La expresidenta transitoria, Jeanine Añez, mediante una carta escrita a mano desde la cárcel, responsabilizó este martes por su salud a las autoridades del Gobierno y Régimen Penitenciario; ratificó que en Bolivia no hubo «golpe» sino «fraude» y que la imputaron por delitos que no cometió, pero «aquí estoy, y aquí estaré hasta que el cuerpo me aguante», afirmó.

“No confío en los médicos del Gobierno, ellos son parte del sistema de abuso y represión. Ya han demostrado (…) que están dispuestos a arriesgar mi vida inyectándome medicación de alto riesgo sin precauciones ni estudios previos, con el solo fin de mantenerme en sus celdas. Si algo mayor llega a pasar con mi salud, responsabilizó a: Luis Arce (presidente), Eduardo Del Castillo (ministro de Gobierno), Johnny Aguilera (comandante de la Policía Boliviana), Iván Lima (ministro de Justicia) (y) autoridades del Régimen Penitenciario”, señala la carta de Áñez publicada en sus redes sociales.

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La exjefa de Estado se encuentra detenida preventivamente en la cárcel de Miraflores de la ciudad de La Paz, desde el pasado 13 de marzo cuando fue aprehendida en la madrugada. Ha sido imputada por los delitos de terrorismo, sedición y conspiración, presuntamente porque gestó un “golpe de Estado” en contra del gobierno de Evo Morales el 2019.

Áñez, la pasada semana se descompensó producto de su presión alta, sus familiares interpusieron una acción de libertad que resolvió que ante su delicado estado de salud sea trasladada de manera inmediata a una clínica de salud, sin embargo, el Gobierno a través de las instituciones que son parte del proceso bloquearon que se cumpla la resolución judicial interponiendo otros recursos.

Añadió que la lucha por la democracia a lo largo de la historia del país ha tenido muchas víctimas y que ahora ella es una más, «bolivianos valientes que han perdido la vida en la batalla. Yo soy una más, estoy serena, estoy aquí y aquí estaré hasta que el cuerpo me aguate», escribió.

Negó los delitos que pesan en su contra, que nunca cometió hechos ilícitos ni tiene antecedentes penales, no obstante, dice que hay un «montaje que se pretende investigar», sobre un caso que no existe al ratificar que en el país no hubo golpe sino un fraude electoral.

«Nunca tuve, ni tendré la intención de irme de mi país como lo hicieron en 2019, a los y las que cobardemente renunciaron por no hacerse cargo de un país en llamas donde solo se gritaba «guerra civil», digan si no fueron cobardes. Pero eso no es todo, ya se llevaron mi libertad ahora atentan con mi salud», sentenció la exmandataria.

Evo Morales y Álvaro García Linera, presidente y vicepresidente, renunciaron al mismo tiempo el 10 de diciembre, ese mismo día dimitieron Víctor Borda a la presidencia de Diputados y Adriana Salvatierra a la presidencia del Senado, también renunció el primer vicepresidente del Senado, Rubén Medinaceli.

Denunció que cuando la arrestaron torturaron a sus sobrinos, que se encontraban de visita, amenazaron a sus familiares, personas mayores y niños hasta dejarlos en un estado de shock. “Quiero denunciar abuso en mi arresto con más de un centenar de uniformados que llegaron armados hasta los dientes, torturaron a mis sobrinos (uno de 28 y el otro de 20)”, expresó.

Señaló que en la actualidad sus hijos se encuentran impedidos de ingresar a su lugar de residencia por lo que no pueden acceder a sacar sus pertenencias personales. “Nos tienen sin ropa y sin poder sacar nada de nuestras cosas, siendo además que en dos oportunidades fue citada por la Fiscalía para que me presente en sus oficinas y la citación me lo hicieron en mi departamento”. Precisó que cuenta con una residencia.

Manifestó que en su casa dejó todas sus pertenencias a la vista porque no tenía intenciones de salir del país y teme que a título de buscar pruebas realicen un montaje en contra en una supuesta «investigación».

Reiteró que en el país no hubo “golpe de Estado”, sino que se gestó un presunto “fraude electoral”. Después de las elecciones generales anuladas del 2019, el expresidente Evo Morales renunció a su cargo de jefe de Estado en medio de una crisis política y social y salió del país.

ANF