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La Paz, 31 ene — Maricruz Ribera, esposa del exalcalde paceño Luis Revilla, prestó su declaración informativa este lunes en la Fiscalía cruceña en calidad de testigo en el caso de la compra de buses PumaKatari con presunto sobreprecio. Aseguró desconocer la ubicación de su esposo.
Argumentó que su declaración no correspondía porque no fue parte del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP), además que el proceso de adquisición cuestionado corresponde a la gestión 2012, cuando ella aún no conocía a Revilla.
“He presentado mi declaración, pese a que considero que no correspondía porque la acusación que implica a mi esposo (Luis Revilla) fue en el año 2012 y yo recién lo conocí en mayo del 2013 y recién me caso el 14 de diciembre de ese mismo año”, explicó Ribera tras prestar su declaración ante la Fiscalía.
La esposa de Revilla declaró por el proceso de investigación que se realiza en contra de Revilla, por la adquisición con presunto sobreprecio de buses PumaKatari, acción que generó, según los denunciantes, un daño económico millonario a la alcaldía paceña.
Rivera rompió en llanto y cuestionó que el Ministerio Público haya emitido una orden de aprehensión en contra de su esposo, pese a que se presentó a declarar en dos oportunidades, indicó.
Luis Revilla, en la primera oportunidad que se presentó ante la Fiscalía, lo hizo de manera imprevista días antes de su cita reprogramada y la segunda oportunidad que llegó a La Paz no declaró porque el fiscal asignado al caso tenía baja médica y suspendieron su declaración hasta el 24 de enero. Sin embargo, no se presentó argumentando problemas de salud, por lo que se emitió una orden de aprehensión.
El 29 de enero, Revilla se declaró en la “clandestinidad” y fugó de las autoridades judiciales que lo convocaron. Más bien, acusó a su denunciante, el dirigente de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de La Paz, Jesús Vera y a la Fiscalía, de “armar” el caso.
ABI